Excelente cata bajo el roble
Es cierto que las visitas a bodega están bastante bien pero no es menos cierto que cuando llevas, cómo es mi caso, alrededor de 200 bodegas a las espaldas, la verdad es que estás harto de ver cubas de acero inoxidable, cubas de madera y todos aquellos elementos la producción del vino. Es verdad que siempre se aprende algo nuevo o se conoce una nueva visión del productor pero no siempre merece la pena invertir una hora y media del tiempo de tu vida más el coste económico que ello supone.
Al parecer a los de Ribera les ha costado, pero empiezan entender el concepto de Wine Bar, dónde pruebas los vinos de la bodega sin necesidad de tragarte toda la explicación que te ofrecen. Esta es la razón por la que fuimos a tu niño de Cair, ya que no teníamos tiempo para hacer una visita completa y la verdad es que el resultado fue excelente.
Tras una pequeña explicación, toma de temperatura y toda la parafernalia de la pandemia nos sacaron la lista de vinos que tienen con el precio por copa y por botella. Como éramos siete evidentemente por copa no interesa así que nos pedimos dos botellas, uno de reserva y otro de Cruz del Pendón.
Lo magnífico fue que nos sacaron fuera de la bodega a tomar las botellas sobre dos barricas que habían puesto allí a la sombra de un roble magnífico y que al ser primera hora de la mañana de un estupendo día de primavera/verano, lo disfrutamos a tope.
Poco me queda por decir, si vas intentando conocer vinos sin hacer visita a las bodegas Cair es de los primeros que está abriendo brecha y eso les hace grandes. Posteriormente y oído que Emilio Moro está haciendo algo parecido… Solo me queda decir bienvenidos a una nueva forma de entender las visitas.
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Perfección, dinamismo e inquietud, estos adjetivos definen en pocas palabras el carácter de nuestra familia, “Familia Luis Cañas”.
Fruto del carácter inquieto del bodeguero Juan Luis Cañas nace Dominio de Cair, un nuevo reto que se resume en un fin, hacer grandes vinos en una tierra excepcional, la Ribera del Duero. Un proyecto que nace desde la pasión por el viñedo y que se culmina con la creación de esta bodega.
Una tierra, Ribera del Duero, que Juan Luis recorrió muchas veces hasta encontrar sus viñedos soñados. Viñas antiguas, algunas de edad centenaria. Cepas viejas, parcas en producción, pero de carácter generoso para dar lo mejor de sí mismas en cada racimo.
En nuestra bodega siempre hemos creído que para crear un gran vino se necesita una gran tierra. Desde esta base se creó Bodegas Dominio de Cair en 2008. Una bodega moderna, de arquitectura vanguardista, en la que nada es fruto del azar, todo en ella está diseñado para lo que verdaderamente importa, óptimas condiciones para crear vinos de calidad excepcional.
Fuente: Riberadelduero.es
