Cocina tradiciona en la montaña
Castell de Guadalest es un pequeño pueblo en un paraje natural sobresaliente que cada año atrae miles de turistas. En los alrededores hay bastantes restaurantes de los que tengo buenas referencias pero yo siempre he ido a este restaurante y siempre volvemos es por que siempre salimos satisfechos.
Cuando se llega al lugar lo primero que te agrada es ese olor a leña de la barbacoa, luego entras a un comedor amplio perfectamente vestido con sus manteles blancos, ventanales con cortinas coloridas y desde algunas de esas ventanas unos bonitas vistas sobre el valle.
Aparte de la carta ofrecen ahora tres menús de degustación muy parecidos pero en los que cambia el segundo plato básicamente.