Cocina mexicana con estrella Michelín
La entrada del local es verdaderamente sencilla y no entender lo que se encuentra en el interior. Nada más entrar y hay dos escaleras en distintas direcciones, hacia arriba una coctelería denominada Mezcal Lab y abajo el restaurante.
El restaurante es alargado como pasillo ancho con mesas ambos lados, al principio y final de dicho pasillo hay mesas más grandes para grupos de cuatro o seis personas y también me pareció ver una especie de salón privado. Cuando entras en el restaurante todo te da la sensación de ser un sitio con clase.
El restaurante ofrece únicamente menú de degustación, en las tres opciones clásicas, largo, intermedio, y express.
Asimismo el comensal puede decantarse por un menú con insectos, ya que en México la cocina de estos animales es mucho más común que nuestra tierra.
Como referencia, se deben calcular a unas dos horas y media para el menú intermedio.
Carta de vinos bastante amplia y como corresponde a un lugar de estas características.
El precio, tomando como base que el menú intermedio en mayo de 2018 fue de 98 €, el resultado final depende de la bebida pero estará en los alrededores de los 125 €.
➕Factura “limpia” que incluye únicamente aquello que el comensal ha pedido y al precio marcado.
➕En general todo espectacular, cocina, servicio, vajilla, etc.
➕Los picantes muy adaptados al gusto español, solo un plato nos pareció a los cuatro comensales que picaba un poco de más.
➖Sé que mantener una bodega tan espectacular como la que tienen, tiene un coste, pero creo que deberían tener un compromiso y poder ofrecer algún vino un poco más económico ya que prácticamente la totalidad de la carta, empieza en 30 €.