Gazpachos de Castalla llenos de tradicción
Nos decantamos en el restaurante La Viscaya por el menú ejecutivo por un precio de 20€ qué consiste en varias entradas de las cuales se pueden elegir únicamente dos y luego un principal que se puede decir entre gazpachos, arroces, fideuá, chuletas de cabrito y algún pescado.
💶 El coste de esta comida fue de 27€ por persona todo incluido y de 20€ por persona sin incluir las bebidas (vino, agua, cafés, cervezas, refrescos, copas…).
🍴 Nos trajeron dos panes, uno tradicional y otro de calabaza; muy ricos los dos y vinieron acompañados de un cuenquito con aceite de oliva también muy rico.
🍴 Como entrada elegimos un plato de embutidos y quesos, muy tradicional, pero donde se ve que se cuida el producto y unas croquetas de cocido y rabo de toro, ambas excelentes pero superior la de rabo.
🍴 Como plato principal pedimos gazpacho de Castalla. Servido con una torta individual y unos botecitos de alioli (que a mí no me pega nada con el gazpacho) y miel para comer la torta después con algo dulce. Al centro una fuente con el caldo para que te vayas hirviendo. Potente sabor y con una buena cantidad de hierbas aromáticas.
🍰 No pedimos postre.
🍷 De bebida tomamos una botella de agua y como vino una botella de el Caire, un Monastrell de bodegas Monóvar que nos recomendó el propietario. El precio era bastante económico (12,5€) y su potencia, no exenta de elegancia, acompañó muy bien los platos que habíamos elegido.
🗨 Local como ya he indicado agradable y acogedor.
🗨 No me queda muy claro con este menú si el postre está incluido o no, o si se puede cambiar por el café. El caso es que pedimos únicamente un carajillo de ron y nos lo incluyeron en el menú, así como el agua.
🗨 Poner solamente dos entradas por mesa me parece bastante limitado, si son dos personas es correcto, pero imaginemos una mesa de 8 que todos tienen que compartir las mismas, un poco limitado.
🗨 Sobre los gazpachos decir que estaban buenos, pero hasta ahí puedo leer. Creo que mi gusto personal está cambiando y cada vez me resultan menos satisfactorios, encuentro más placer en un arroz o en una fideuá que en el gazpacho. Por ahora excluyó a los de pescado.
El viscayo es un restaurante muy conocido en la población de Castalla por sus gazpachos y por las bromas que hacía el propietario con juegos de cartas y su famoso “chichiriguiki” (una infusión).
La viscaya, la hija menor, decidió instalarse por su cuenta y montó un restaurante en el centro de Castalla, con los mismos principios de cocina pero en un entorno que para mí es mucho más acogedor, aun manteniendo una decoración rústica.
Al parecer la continuidad está asegurada pues el hijo de la pareja está estudiando cocina.
Ofrece varios menús a precio cerrado oscilan entre los 20 y los 28 €, además de una carta.
La carta de vinos es bastante limitada, pero suficiente para tener una elección decente al tiempo que los precios son razonables.ç
➕ Factura limpia: el comensal solo paga por aquello que ha pedido, sin gastos ocultos (pan, servicio, cubierto, etc)
🗨 Sin problemas para aparcar en ninguna época del año.
